28 de diciembre de 2011

Tiempo de valientes

Desde que murió Ivan me preocupa el tiempo. Lo efimero del tiempo. El poco tiempo que tenemos. La teoría indica que las corporaciones juegan con el tiempo a favor. Juegan al desgaste, al desgaste minúsculo. Juegan a que siempre van a estar, mientras los gobiernos pasan. El tiempo, de vuelta, nos juega en contra. Nunca hay suficiente tiempo para hacer todo lo que hay que hacer. En Brasil dicen que necesitan 30 años para llegar al nivel de vida europeo. 30 años. Dentro de 30 años voy a tener edad de jubilarme. Quizás vea, dentro de 30 años, que no hay pibes pobres ni villas miseria. ¿Aguantara Cristina 30 años? Es de creer que no. 

¿Que va a pasar cuando se acabe el tiempo? ¿Que va a pasar cuando los nuestros estén mas cómodos en los despachos que en la calle? ¿Y cuando estemos mas preocupados por nosotros que por el todo? La Juventud debe preservar la unidad del movimiento político. La organización es lo que nos da tiempo. Ese tiempo que nos falta, que se nos escurre de las manos, que nos hace sentir angustia por no poder todo lo posible, pero a la vez saber que mas es muy dificil. Los presidentes latinoamericanos dejan jirones de su vida en la lucha por la unidad latinoamericana. jirones que los pueblos toman como banderas. 

Cada vez tenemos mas urgencia porque cada vez tenemos menos tiempo. Las cosas cambiaron. La contundencia del triunfo de oktubre, donde se pleibiscitó el modelo, y el modelo (no Cristina) arrolló a lo otro, hizo que las cosas cambien. Siempre dijimos que los procesos históricos son complejos y que están quienes los interpretan y quienes no. El momento exige unidad. Pero una unidad para ir para adelante, no una para volver al pasado. Una unidad popular que le sirva al Pueblo como herramienta de profundización del cambio. 

En ese tiempo que nos escasea, tenemos que seguir peleando. Nada está dicho. El fin de la historia no existe y la derecha siempre va a querer mas. La derecha es siempre angurrienta. Y nosotros tenemos que ser distintos. Dice Manolo algo con lo que yo coincido

La Guerrilla que se ha llevado hasta ahora es victima de su propio éxito; muchísimos compañeros son “estrellas” por su propio merito, o se han convertido en “trofeos” de Dirigentes y/o Funcionarios, que los exhiben en lugar de ponerlos a producir.
La burocratización, hija del tiempo transcurrido, tiene algún nivel de avance. José Pablo Feinmann, entre muchas de las pavadas que dice (lo de la donación de 10 palos para hacer un barrio rankea como la boludez de la década) nos corre con que no tenemos ideas. En vez de indignarnos con él, habría que demostrarlo. Con hechos. Porque, claro, mejor que decir es hacer. Je.  Sobran ideas, para que quede claro lo que pienso. Pero nos falta tiempo. Y eso no nos sobra. Lucas tiene algún enojo con aquellos que están cómodos en las oficinas. Yo tambien. Es tiempo de seguir peleando, de transformar definitivamente la argentina. Es tiempo de unidad para profundizar, de bancar para ir por mas. Con ideas, claro. Con nuestra subjetividad al palo. 

El tiempo que nos falta y que se pierde en boludeces. Las hormigas no descansan. Mendieta nos hace pensar un poco, en este sentido:

La vista fija. No olviden tener la vista fija ahí. Observar. Estudiar. Pensar. Pensar en los hechos. En lo hecho y en lo deshecho. En los desechos. Sentir. Sentir como late la araña, como nace el hilo, como surca el aire. Y dejar la contemplación. Que de contemplación está aburrido el mundo. Y jugarse a volar, rodeado de cosas que no vuelan. Volar como un mosquito, saltar como un renacuajo. Ahí. Donde uno sueña con ser atrapado para cerrar el círculo que te trajo hasta acá.
No tenemos tiempo para boludear. No tenemos tiempo para ser obsecuentes, para pensar que todo está realizado, para administrar la realidad. Esto que vivimos es una revolución. Distinta en lo formal a lo que se conoce teóricamente, pero real. tan real que da miedo. Las bases de la democracia condicionada que heredamos de la dictadura se están deshaciendo. Las corporaciones que gobernaron el país hasta hace poquito están ahi, agazapadas, esperando nuestro fracaso. Tienen todo el tiempo del mundo. Nosotros estamos apurados, porque queremos a todos adentro, lo mas rapido posible.

5 comentarios:

  1. Sí que tenemos una parada difícil por delante. Bueno, como el camino es largo mejor vamos saliendo...

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  2. Justo el otro día hablaba con un familiar del "Campo" y él me preguntaba con qué cosa no acordaba con el gobierno. "Básicamente con las cosas que todavía no ha hecho, pero sé que no le va a alcanzar el tiempo para realizarlas".
    Pero el tiempo también puede estar de nuestro lado si logramos lo que no había en Octubre: alguien que no sea CFK. Tenemos 4 años.

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  3. Me hiciste reflexionar y me angustiaste. Gracias.

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  4. Iris, cuando en un video juego ganas una pantalla, lo que sigue siempre es mas dificil. Exige mas atención, mas capacidad, mas ganas, mas voluntad. Hay que estar a la altura

    Sergio, ese es el desafío: la continuidad del proyecto político

    Gracias Ricardo

    Sebastian, de nada, aunque no se si me alegro de haberte angustiado (?)

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