30 de junio de 2016

Las corrientes torrentosas de la historia


Todos nos sentimos, desde hace seis meses, como Sam y Frodo dentro de Mordor. Una altisima posibilidad de que las cosas no sucedan para nuestro lado y sin embargo seguimos para adelante, casi por inercia. Hay que tirar el anillo en la Montaña del Destino, y después vemos. Todo está mal. Orcos por todos lados, no hay sol, no hay agua ni comida, y el calor es asfixiante. Hasta Frodo tuvo momentos de duda y debilidad. Pero Sam no. Sam siempre creyó.

Todos somos un poco Frodo y un poco Sam. Especialmente en estos días. Dudamos un poco de que esto alguna vez se solucione y creemos que alguna vez se va a solucionar. Entramos asi en una locura que ya lleva poco mas de 6 meses. ¿Hay que ser Frodo o hay que ser Sam? Esa es la pregunta y para contestar eso hay que remitirse, siempre, a como son los procesos históricos. Perón lo explicó magistralmente

"...Muchos han despreciado el ingenio y el poder del pueblo, pero, a largo plazo, han pagado caro su error. Los pueblos siguen la táctica del agua. Las oligarquías, la de los diques que la contienen, encauzan y explotan. El agua aprisionada se agita, acumula caudal y presión, pugna pro desbordar; si no lo consigue, trabaja lentamente sobre la fundación, mimándola y buscando filtrarse por debajo; si puede, rodea. Si nada de esto logrea, termina en el tiempo por romper el dique y lanzarse en torrente. Son los aluviones. Pero el agua pasa siempre, torrencial y tumultuosamente, cuando la compuerta es impotente para regularla..."
Del (Artículo del Gral Perón en el diario “Democracia” - 31/07/1952)

Los que hoy se dedican a la rosca de Palacio y votan leyes absurdas para el beneficio popular, olvidan este tipo de cosas. El agua siempre pasa. Tardará mas o menos. A mi me gusta interpretar que vivimos fases de nuestra independencia. A principios del siglo XIX fue nuestro derecho a ser una nación independiente; a principios del siglo XX, nuestro derecho a ser ciudadanos de esa nación, a mediados del siglo XX, nuestro derecho a gobernar esa nación; a principios del siglo XXI, fue reafirmar todos estos derechos y mostrarnos que es el poder económico corporativo nacional y transnacional el que no deja que los países se desarrollen, o mejor  dicho, el que marca que nivel de desarrollo tiene cada país en función de sus intereses.

Los pueblos siempre avanzan. A los pueblos se los puede detener, obstaculizar, intentar confundir. Pero a la corta o a la larga, sale. La historia es nuestra historia. Entender nuestro protagonismo es esencial para nuestro futuro. No existen los dirigentes sin el respaldo de alguna de las corrientes históricas. Por mas votaciones que haya, hay que ser cada vez mas Sam, para cumplir con nuestro destino.

12 de junio de 2016

Un país inviable

El macrismo asumió con una idea base: el país que heredaba no era sustentable. Se basaba en dos cuestiones simples: los subsidios del Estado a los servicios y al transporte y lo bajo de las tarifas de esos mismos servicios y ese transporte. Anunciaban que eso generaba un déficit que no daba para mas, ademas de generar distorsiones en las estructuras de costos de las empresas. Había que SINCERAR esos números para que lleguen inversiones y se pudiera crecer con SUSTENTABILIDAD. Había que sacar subsidios y subir tarifas, para bajar la inflación que carcomía las posibilidades de inversión y desarrollo. SINCERAR para DESARROLLAR, era el lema. SINCERAR para evitar una crisis. SINCERAR para que el país no se vuelva inviable.
Y sinceraron al dólar, a las tarifas de los servicios, a las tarifas del transporte, a los precios y a los salarios. El salario real va a caer entre 3 y 13 puntos, según la rama de actividad. Flor de sinceramiento: quieren salarios mas baratos.
Y, mágicamente, crearon una crisis que no existía. Desde diciembre de 2015 cae el consumo, la tasa de inversión, la producción industrial, la construcción, la actividad en general y sube la pobreza, la indigencia y el desempleo. Transformaron la posibilidad de un país inviable, en la certeza de la inviabilidad a partir de las medidas que tomaron. Una especie de profecía autocumplida pero al reves: fue el llamado sinceramiento lo que produjo la crisis. Y no es ninguna novedad. Toda vez que se tomaron medidas de este estilo, terminó en una crisis económica, que se transformó en una crisis política que terminó con el que estaba en el gobierno, fuera del gobierno y del poder. No hay novedades. La única duda es si va a ser civilizada o barbárica la salida de Mau. Y cuando. 
Entender que son las medidas del macrismo las que provocaron la crisis es clave. El tocuen de la herencia le puede resultar para ese 15/20 % de gorilas antiK q existen desde q el peronismo existe. Al resto de la población hay que tratar de explicarle que si antes estaba mejor era por un contexto económico, que ahora CAMBIÓ. Y que ese CAMBIO fue para beneficiar a los mas ricos de la población y perjudicar a pequeños comerciantes, PYMES y trabajadores en general. Es decir, al 90% de la población. Mientras no entendamos esto, vamos a seguir corriendonos nuestra propia cola, sin poder alcanzarla, claro. Y el presidente Mau, mientras boludeamos con nuestra cola, transforma en mas inviable nuestro país. 
Para el final, dejo un parrafo de la interna del PJ. Veo muchos que estan preocupados por posibles reacomodamientos. Recuerden que cuando parece que peleamos, nos reproducimos. Y todos sabemos que se necesita a cada compañero (no insisten, Massa no es un compañero) para ganar en 2017. Nadie se puede dar el lujo de ser sectario, ahora menos que nunca. Hay que dejar que corra el agua, para ver donde está el río.