Aumento de Legisladores - Una reflexión

El 2001está acá nomás. Si creímos que por arte de magia las cosas se habían superado, les tengo una muy mala noticia: NO. Todavía vivimos este período histórico como un paréntesis. estamos agazapados esperando que nos caguen. "Los políticos" siguen siendo eso y solo la magia de Cristina logra que las aguas estén calmas. Ayer se produjo una minirevolución porque La Nación dijo que los Legisladores Nacionales se habían duplicado el sueldo. Mas allá de lo mentiroso y manipulador de la información (que se puede ver acá) el tema es como nosotros podemos caer en una trampa tan berreta. Es decir, como le creemos a La nación y no a los (nuestros) Diputados y Senadores.

Acá está el punto. Para mi son nuestros. Yo los banco, los defiendo y los apoyo. Especialmente a aquellos que pusieron lo que había que poner en los momentos mas difíciles. 125, Ley de Medios, Matrimonio Igualitario, estatización de AFJP. Por citar los mejores mojones legislativos de la historia reciente. Sin embargo, ayer repetimos (aunque yo no lo dije me hago cargo de ser parte del colectivo) todo el día que era una barbaridad que los legisladores se aumenten el sueldo. Asi. Sin contexto. Sin historia. Alguien a quien yo respeto mucho como militante, me llegó a decir "sabes la caja que manejan los legisladores?". 

Estamos locos. La política se hace con plata. Eso lo sabemos todos. ¿O nos vamos a empezar a hacer los giles ahora? Entender que el mundo cambió, pero especialmente cambió Argentina sigue siendo una necesidad. Los reclamos sectoriales (y hasta indviduales) son las más válidos del mundo, porque en definitiva, si uno está dentro de un proyecto político a favor del Pueblo, y se siente parte de ese Pueblo, quiere ser feliz. Eso está claro. 

Pero (siempre el maldito pero) la cuestión es la reacción propia. No podemos reaccionar como si este Congreso fuera el del recorte del 13%. O el Congreso de las privatizaciones. Este Congreso (y la mayoría por la que todos trabajamos) es nuestro Congreso. Caerles así, por un (UN) artículo de La Nación, sin corroborar la info, es de verdes. Estamos verdes. No cuidamos lo que tenemos porque creemos que ya está. Y no está nada. Queremos discutir la minería y atacamos a los propios. Maduremos. Crezcamos. Dejemos el anarco-peronismo para épocas donde sea realmente necesario. Hoy somos el ESTADO. Si no nos hacemos cargo de eso, menos nos vamos a hacer cargo de la felicidad del Pueblo y la grandeza de la Patria.