Sueños y realidades

Es la 1 y media de la mañana. Hace calor pero no tanto. Mi cabeza da vueltas sobre un tema que no puedo definir. El país se encarriló un poco (falta mucho). La opo está en fase de implosión. La corpo casi que asume su derrota. Sin embargo, siento que falta mucho. La sensación de que no hay tiempo es agobiante. Si bien se que hacen falta 20 años para que el país realmente funcione como debe, la sensación de que siempre es tarde, de que donde lleguemos siempre habrá sido mejor un año antes. 5 años. 30 años.
Estamos cambiando la Argentina. Los que no lo ven son miopes. Los que discuten lo accesorio, sin llegar a lo central, son berretas. Ya no alcanza con decir que son funcionales a la derecha. Eso estuvo bien un tiempo, uando resistíamos los embates de los medios concentrados y sus gerentes de RRHH. Hoy, hay que armar una nueva agenda. Nuestra. Una agenda popular de los problemas que hay que resolver para que nuestro país (y nuestra región) sea definitivamente soberana.Discutir una agenda desde el pueblo y para el pueblo. Obviamente eliminar la pobreza es la prioridad 1, pero tener soberanía energética tambien lo es. Y lo es tambien enfrentar a los grupos concentrados que remarcan precios porque son dueños de la cadena comercial. Y lo es tambien discutir con los grupos de telecomunicaciones un nuevo marco legal para la actividad. Y cambiar la Ley de Entidades Financieras. Y el Codigo Minero.

Hay mil cosas para hacer. Agarramos un país desvastado. Al borde de la disolución. Nos pueden criticar que no enfrentamos a todos los poderes económicos. Quizas. Yo solo digo, que vengan de a uno. Para todos hay algo. Y para todos les prometemos mas democracia. Como nos enseñó Nestor.

Son las 2 y media de la mañana. Me voy a dormir soñando con un país mas justo. Cuando me levante, seguiré trabajando para que sea realidad