Triunfó con poca diferencia el candidato que menos certidumbre podría llevar a los mercados internacionales, y a la sociedad peruana toda. Es decir que Perú votó por Ollanta Humala, entre otras cosas, porque está en condiciones de animarse a salir del mundo prefabricado que construyó el liberalismo peruano. Animarse a salir de las certezas que ofrecía la candidata Fujimori, las de saber que en ese país la exclusión sería la regla y que el crecimiento, sería como para los argentinos ese mito del país del centenario. Se crece y se aparece en los mejores rankings de las mejores revistas de economía, pero el pueblo en su conjunto la mira con la ñata contra el vidrio. Esa sociedad hoy se pone en cuestión. Decíamos en
http://losoperariosdelplan.wordpress.com/2011/04/11/el-destino-del-peru/ que no será para nada fácil, que tendrán que negociar mucho, y sólo podrán construir gobernabilidad transformadora asumiendo un sentido común del cambio, yendo por las demandas históricas que garanticen legitimación, para enfrentar los ataques virulentos de un sistema que tiene como punta de lanza, como en el resto de Latinoamérica, a poderosos medios de comunicación.La elección demostró que no hay ningún proyecto político que haya afincado una raíz fuerte en el pueblo, construirlo es uno de los objetivos primordiales para garantizar que las transformaciones que se realicen puedan perdurar e institucionalizarse. En 5 años si se desarrollan las expectativas de intentar la transformación debería existir Humalismo u Ollantismo, el destino dirá. En América latina hemos tenido experiencias de todo tipo con militares nacionalistas. Chavez siempre menciona a Velazco Alvarado, patriota peruano, como uno de sus mentores. Ollanta humala deberá elegir su destino.
Y ante la tarea gigante que se impone hacia adelante tiene una certeza grande, no está solo.
Bienvenido Perú al proyecto Latinoamérica libre y soberana.
Es de
aca
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