Resulta que toda esta operatoria del caso Schoklender (o John Lender, según el locutor), toda esta embestida, esta crispasion, era para que Cristina dudara. Y no se presente, claro. Y designe, ponele, a Scioli. Pero no. Cristina, que la tiene mas clara que vos, yo y todos juntos, no dudó. Y se las mandó a guardar. Bien kirchnerista el método. Todos estaban viendo quien reservaba el Argentino de La Plata. Yo tambien, claro. Lo anunció asi, natural. Como quien dice voy a comprar un chocolate y vuelvo.
Clarín ya no echa presidentes, ni gobernadores. Ya no pone, ni siquiera, Jefes de Gobierno. Ni siquiera tiene el poder de hacer dudar a nadie. Está perdido Clarín. Tiene muchos problemas internos. Todo indicaría a que la sucesión de Ernestina será sangrienta. Tiene problemas Clarín. Muchos. Marcela quiere conocer su identidad. Anotenlo y después me cuentan.
El fin de la era Magneto acaba de empezar.
Unos cuantos que estarían tomando el five o'clock tea con scones y croissants se deben haber atragantado ayer...
ResponderEliminarRicardo, están hasta las manos. En serio. No saben como remarla.
ResponderEliminar