Volver a Nestor

Cuando en 2005 (hace 6 años, una eternidad) Nestor le rompio el culo a Duhalde en la Provincia de Buenos Aires todos vimos que se habría una grieta en la historia. Que recuperabamos mística, alegria, ganas por cambiar la historia. Que recorríamos caminos impensados y que todo era posible. Si, creíamos que todo era posible y que el único límite era el infinito.

Dicen que la diferencia entre un cuadro político y charlatán de feria es su capacidad de interpretar la realidad para poder modificarla. Ningún cuadro político lee una realidad que no existe. Ningún cuadro político se pone objetivos inalcanzables. Una cosa es defender las convicciones (irrenunciable) y otra cosa es ser irreal. Lo clarifico con un ejemplo. Nestor lo cagó a Duhalde en 2005, porque antes no podía. Y no intentó hasta que lo logró, sino que lo intentó cuando podía hacerlo. Un genio. Por pensar la maniobra y ejecutarla en el momento preciso.

Todos debemos ser Nestor, en todos los sentidos. Pensar una maniobra y ejecutarla en el momento preciso. Interpretar la realidad para poder modificarla. Ponernos objetivos en nuestros barrios, nuestros ambitos de laburo y llevarlos a cabo. Ser un poco mas transgresores de lo que somos. La verdad es que somos poco transgresores. Hay mucha obediencia por este lado ultimamente. mucho miedo a salirse de la tactica del DT. Cumplimos demasiado bien el rol que se espera de nosotros. En futbol, cuando hay demasiada obediencia hay poca (o nula) sorpresa. Hoy no tenemos sorpresa. Tenemos a Maradona que te saca un conejo cada tanto y un equipo obediente. 

Nestor no era obediente. Y nos pidio a nosotros que no lo seamos. Ser obediente es ser conservador. Yo quiero ir por todo. Quiero que el pueblo vaya por todo. No quiero que Cristina me obligue a ir por todo. Quiero que podamos hacerlo. Hoy dependemos de Maradona. El tema es que tiene un nivel tan parejo que ya no sorprende. El resto miramos, enamorados. Sabemos que nos va a hacer ganar el partido. Confiamos. 

Hay que hacerse cargo de la realidad. Entenderla. Y modificarla. Siempre. Lo revolucionario no es que llegue alguien y modifique un rato la vida de todos, sino que todos modifiquemos nuestra vida, un poquito, todo el tiempo, para poder modificar la de todos, un poquito, todo el tiempo. Hacerse cargo de la realidad implica ser parte de la realidad. Convivir con esa realidad. no enojarse por como es. No querer cambiarla por decreto. Si un partido está chivo, hay que  pelearlo y ganarlo de pelota parada, si es necesario. Interpretar la realidad es eso. Es tener los recursos para ganar jugando al futbol y para ganar con el cuchillo entre los dientes, y saber cuando hacer cada cosa. Lo peor que podemos hacer, de todos modos, es frenarnos ante la incertidumbre, porque se agrandan los contrarios.

Cuando se murió Nestor, desde este blog dijimos que se había retirado el capitán que llevaba el equipo hacia adelante, el que nos pegaba 3 gritos y nos hacía movernos. Es momento de despertar, de que todos nos gritemos entre nosotros, para volver al partido. Entre todos podemos. Pero entre todos y con todos los que quieran jugar para nosotros.